Uno de los aspectos más importantes que tenes que trabajar para mejorar tu eficiencia como runner es tener una correcta técnica de respiración
¿Respirar por la nariz o por la boca?
Para correr, lo ideal es respirar principalmente por la boca. Cuando corremos, el oxígeno que requieren nuestros músculos es mucho mayor, por ello la respiración por la boca es más eficaz y rápida, ya que el flujo de oxígeno es mayor por esa vía. Sin embargo, si todavía necesitas más oxígeno, siempre podés incorporar la respiración por la nariz, ayudando así a aumentar la cantidad total de oxígeno
¿Cómo es la frecuencia?
La frecuencia de respiración más usada es el ritmo 3:3, es decir, tres pasos por cada fase de la respiración. A esa velocidad de respiración y esfuerzo, la frecuencia 3:3 es más que suficiente para introducir y procesar la cantidad de oxígeno en el cuerpo. En promedio, los corredores dan unos 180 pasos por minuto eso significa que, a una frecuencia 3:3, se dan 30 respiraciones por minuto corriendo a ritmo suave. A ritmos más altos la frecuencia puede ser 2:2 e incluso 1:2 o 2:1
Tipos de Respiración
La respiración debe proceder del estómago o, como se conoce técnicamente, la respiración diafragmática. Esta es la que tienes que llevar a cabo para fomentar la circulación del oxígeno en el organismo y que te ayudará a mejorar en tu rendimiento deportivo
La respiración que sale del pecho es la más superficial y, con ella, el aire se queda en los pulmones por un tiempo muy corto, por lo que no se realiza un cambio de aire completo y no se transporta bien el oxígeno
Beneficios
- Aumento de elasticidad en pulmones y tórax
- Mayor relajación física y mental
- Oxigenación óptima para el cerebro
- Mejora del estado del sistema nervioso
- Aumento de la cantidad de sangre, gracias a una mayor oxigenación
- Rejuvenecimiento de la piel y fortalecimiento de los pulmones
Podés correr mejor!